"Bueno, no sé en que estaria pensando, ideas sueltas quizas. Seguro que en algunas líneas coinciden o son de su interes y si no es el caso, pues gracias por haber prestado su antención"
*Cada uno es
hijo de sus obras… (Don Quijote de la
Mancha)
-Así es verdad –
Pero este elegido presidente, de este o de aquél partido ¿de qué obras es
hijo?, si en este país quien calla otorga o permite que otros con su
beneplácito, se lucren de forma torticera, porque piensa que si el no ha hecho
nada que le puedan demostrar, nada que mancille su nombre ni su cargo, cree
estar libre de culpa y sospecha, cuando la cruda realidad, es que debe
obediencia al partido. ¿En el fondo no estará renegando de esa estructura
piramidal?, donde los viejos caciques del partido mandan. No se puede ser Juez
y parte, y pasa directamente a cómplice… Uno de los precios que hay que pagar
por perder la libertad individual, para ser uno más en el entramado.
Y si cada mañana
se desayuna con otro caso de “chorizos”, no estará poniendo en riesgo su salud,
le debe de estar mortificando ese colesterol que obstruye, sus principios y
creencias, su buen hacer como ciudadano al servicio de su país. Con qué fuerza
moral alza la voz en contra de otros, si es cómplice de sus mal elegidos
compañeros de viaje. Con qué cara se presentan a unas nuevas elecciones, con un
programa que huele a muertos y podredumbre, como quieren nadar y guardar la
ropa. Aprendices de hombres y mujeres de estado, que en el Debate del Estado de
la Nación, en
vez de empezar pidiendo disculpas a todo el país, se dedican como niños
pequeños a insultarse, a sacarse los trapos sucios como si el hemiciclo fuera
un programa de esos chorras donde lo soez y escandaloso hacen que los que no
piensan, se queden enganchados a tanta mediocridad. Cuando deberían de estar
peleando codo con codo por arreglar tanto destrozo.
Pero son hijos e
hijas de su soberbia, de su ignorancia y siento pena por los pocos que están
preparados y son engullidos por esa conciencia de de partido, esa lealtad que
entregan sin cuestionarse. Pierden a si su libertad como individuos y mi
respeto como ciudadano cabreado, al que le da vergüenza ajena ver el desfile de
prepotentes por los medios de comunicación.
Esos que de
tanto mentir, de tanto negar como estrategia, terminaran convirtiendo la mentira en verdades, a fuerza de repetirlas.
Que duele y cada
día más, este país de charanga y pandereta que pronto ha aprendido a evadir
divisas, a robar al que menos tiene y encima a créese en el derecho de
perpetuarse en el poder.
Pero lo que más
me jode, es pagar con mis impuestos a tanto desalmad@, su dudoso derecho a
soltar las patrañas de sus proyectos si ganan las elecciones. esto me recuerda
a las invasiones de un país a otro,
cuando consiguen conquistarlo se dedican a borrar los vestigios de los
naturales para sobre sus ruinas imponer su modelo y así hacer creer al incauto
que ahora están mejor, Porque, el acto vandálico de los nuevos, les proporciona
trabajo, mal pagado pero trabajo.
Cuando la
realidad simple y llana es que desmontaron, lo bueno y malo que había, lo bueno
y malo que ellos implantaron o los anteriores, y sobre la misma base volver a
crear “pan para hoy y hambre para mañana” un pasito adelante y cincuenta para
atrás.
Y el otro dolor
me viene de esos que depositaron su confianza en estos señores y señoras, que
han sido chuleados, pero que uno no sabe, porque vuelven los mismos a votarlos,
cuando han sido traicionados como el resto del país.
En fin… ni
Casta, ni Caspa, las cosas por su nombre ¡¡Sinvergüenzas, del primer@ al ultimo
y como siempre. El que este libre de culpa… pues nada ¡Que se presente a
Presidente!
Al resto buen día y sean moderadamente felices
Epi
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