Las
ausencias con el tiempo
El
dolor con la indeferencia
A
fuerza de embrutecernos fuimos creciendo
la
vieja España si iba diluyendo
Los
“cara al sol”, más por frío que por convencimiento
no teníamos
nada
por
nada peleabamos
básicos
como la vida misma
El frío
nos fue aunando
los
que perdimos a alguien nos fuimos endureciendo
descreidos,
individualistas
con
nuestra particular lucha a cuestas
sin
saber, explotamos la ironía
esta
a su vez nos fue salvando
De
no querernos nadie, terminamos amando
De
no vernos, acabamos viendo
Emprendimos
el viaje, la aventura de crecer
nos
sacudimos el polvo de la indeferencia
El
mundo cambio vertiginosamente
pero
nosotros seguimos una decada más
anclados
en la memoria, en el ostracismo
sin
aceptarnos, sin que nos aceptaran
…
Salvo algunos Honestos, de entre ellas y ellos.
Como
siempre… ¡Fuimos los últimos!
¡Que
culpa tuvimos de haber nacido en tiempos convulsos!
Si
solo éramos niños... niños viejos
a
fuerza de dolor, de indeferencia… de amor
sin
infancia, pero llenos de mocos, con tiña, con piojos
con
tristeza… solo niños
Tan
solo somos una porción
porción
de niños viejos, de viejos niños…
¡Legión
de descreídos!
Epi
Epi
No hay comentarios:
Publicar un comentario