jueves, 6 de marzo de 2014

… dormida entre las algas



Desde el  finĭbus térrea, vengo buscando tu rostro
acariciando tu voz sonora, que me atrapa.
                                   *
Pregunto  y nadie sabe darme respuestas
Ser Ulises, ser Odiseo, sin amarras
No quiero ser argonauta, de sordera premeditada
por que añoro tu canto de Sirena,
que hace saltar mi cuerpo en las profundidades heladas
respirar bajo las aguas, recorrer tus cordilleras
y ver si entre el coral te hallas.
                                   *
Que dulce ponzoña, ¡no quiero remedio ni cura!
tan solo la dulce quimera de tu amor, me sana
que de vivir sin ti… Ligeia, no encontrare igual,
que entre sus brazos me retenga.
                                   *
Oírte y renacer todo es uno
No quiero Orfeos que me distraigan
ni consejos de Circes que tu voz apagan
                                   *
No pido ser salvado en la tierra
cuando en el mar te hallas
Al mar pido, que no me devuelva
que dormir en sus profundidades deseo
hasta que tú, por mi lado pases
y tu canto como un bálsamo, me reclame
                                   *

Ya no quiero andar entre los hombres
no quiero esta vida seca, que la luz delata.
Sólo el mar de tu mirada… aguamarina
y recobrar la paz que la ausencia de tu canto me arrebata
                                   *
Y si no puede ser así… cuando muera
que echen mi cuerpo al agua…
que mi alma no puede estar varada
en ninguna playa…
                                   *
Ligeia, canta, que no he de perder la esperanza
de encontrarte amor
 … dormida entre las algas

                                                                  Epi

No hay comentarios:

Publicar un comentario